SABIAS QUE EL ESPÍRITUS QUE MORA EN CRISTO Y
EL ESPÍRITU QUE DA VIDA AL HOMBRE DE DIOS
ES EL MISMO
EL ESPÍRITU DE SANTO DE DIOS, mora en el corazón de todo creyente que con entrega ilimitada y sin reservas se ha acercado a DIOS a través de nuestro AMADO SEÑOR JESUCRISTO; con la única finalidad de ENTEGARLE SU SER.
Una de las grandes promesa de CRISTO, a sus Discípulos después de su resurrección, quedo inmortalizada en LA PALABRA DE DIOS, en el Libro de Hechos capitulo 1, versículo 8 donde podemos leer: PERO, CUANDO VENGA EL ESPÍRITU SANTO SOBRE USTEDES,
RECIBIRÁN PODER y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.
Versículos de la Biblia que hacen referencia al Espíritu Santo y al espíritu del hombre unidos, pero con razones diferentes.
El evangelio del Apóstol Juan en el Capítulo 3 versículo
6 establece lo siguiente, “LO QUE ES NACIDO DE LA CARNE, CARNE ES; Y
LO QUE ES NACIDO DEL ESPÍRITU, ESPÍRITU ES”.
Este versículo menciona dos espíritus: un Espíritu escrito
con letra mayúscula, la cual hace
referencia al espíritu Santo de DIOS y el otro espíritu el cual está escrito
con letra minúscula este se refiere al espíritu presente en el hombre, un espíritu
transformado. La transformación del espíritu
del ser humano, se lleva a cabo por la intervención del del Espíritu Santo de DIOS
con la persona que ha decidido por su propia voluntad, empezar una nueva vida,
guiado por Jesucristo y declarando espontáneamente que el sacrificio que NUESTRO
AMADO SEÑOR JESUCRISTO llevo a cabo lo hizo por él, hecho que lo hace ESPIRITUALMENTE
JUSTO Y PERFECTO delante DE DIOS, este versículo habla de un nuevo nacimiento,
donde pasamos o nos convertimos de Criatura de DIOS a HIJO DE DIOS.
Cuando somos justificado, por el sacrificio de
CRISTO, debemos dar testimonio de nuestra transformación como verdaderos HIJOS
DE DIOS, como lo establece el libro de Romanos, en el Capítulo 8, versículo
16 el cual dice: El Espíritu mismo DA TESTIMONIO juntamente
con nuestro espíritu, de que somos hijos de DIOS.
Al dar testimonio que somos HIJOS DE DIOS, debemos
hacerlo sin PENA, con GOZO, declarando al mundo de donde Y EN QUE condiciones nos
sacó DIOS, a través de Nuestro Amado señor JESUCRISTO, PORQUE EL UNICO QUE NOS
PUEDE SALVAR Y LLEVARNOS A DIOS ES ÉL,
CRISTO QUIEN DERRAMO TODA SU MARAVILLOSA SANGRE POR MI, POR TI, POR TODO EL
MUNDO.
Una vez que hemos
recibido la SALVACION ETERNA A TRAVES DE JESUS, EL GRAN YO SOY nos sella con su
INDESCRIPTIBLE (EL HOMBRE NUNCA PODRA DEFINIR UNA PALABRA, QUE DESCRIBA LAS
MARAVILLAS DEL ESPIRITU DE DIOS) ESPIRITU, asi quedo establecido en la Epístola
a los Efesios en el Capítulo 1 Versículo 13, el cual dice lo siguiente: En él también vosotros, habiendo oído la palabra
de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y HABIENDO CREÍDO EN ÉL,
FUISTEIS SELLADOS CON EL ESPÍRITU SANTO DE LA PROMESA,.
Realmente cuando
fuimos corriendo a los brazos de JESÚS, al aceptar lo que el nos promete,
al entregarle la existencia de nuestro ser (ESPIRITU, ALMA Y CUERPO) sin límite
alguno, NOS HICIMOS UNO CON ÉL, esto lo deja claro LA PALABRA DE DIOS EN
LA PRIMERA CARTA A LOS CORINTOS, en el Capítulo 6 Versículo 17 que indica lo
siguiente: PERO EL QUE SE UNE AL SEÑOR, UN ESPÍRITU ES CON ÉL. Esto nos
indica, que el mismo Espíritu que mora en CRISTO mora en cada uno de sus Hijos,
aquellos que han aceptado a JESUS, con todo su Corazón, Con toda su Alma y con
Toda sus fuerzas, DIOS quiera que estos mensajes sean los que lleguen a quienes
están deseosos de tener un encuentro y una relación íntima con DIOS y no
mensajes estériles como los que hoy en día, se hacen presente en todos los
medios de comunicación del mundo, pero muy especial en América Latina, donde el
Evangelio de DIOS, se ha establecido como una manera de hacer dinero, estas
personas deben saber que ya tienen su paga, DIOS los juzgara.
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